¿Cómo implementar un Sistema de Reciclaje en empresas y organizaciones?
Una nota compartida por la asociación MUJERES ECOSOLIDARIAS
Los últimos 5 a 10 años, el tema del medio ambiente se ha convertido en un reto importante para los políticos, la industria y los ciudadanos. ¿Las empresas deberíamos implementar un sistema de gestión de residuos o es mejor no emprender este esfuerzo? Queremos explicar qué significa implementar un sistema de reciclaje en una organización: ¿Cómo lo podemos hacer? ¿Qué actores y estrategias involucra?
Presentaremos un modelo de emprendimiento social -Mujeres Ecosolidarias en Arequipa- que ofrece un abanico de servicios a los diferentes actores de la sociedad, combinando una sólida apuesta de desarrollo tecnológico-industrial con incidencia política que desemboca en un cambio de hábitos de la población.
Todos los residuos que generamos tienen nombre y apellido de la persona que los generó, por tanto es nuestro deber hacernos cargo de ellos. El reciclaje es un gesto práctico y tangible vinculado a nuestro rol como ciudadanos que nos da pie a reflexionar sobre nuestra propia huella de carbono. Los recursos que utilizamos para fabricar productos, son en su mayoría, recursos finitos, que en algún momento se acabarán. Por ejemplo, muchos de los plásticos que utilizamos son derivados del petróleo, que es un recurso no renovable.
Por otro lado, la presión social es cada vez más fuerte. Muchos consumidores valoran las iniciativas de empresas para ser más sostenibles y varias marcas emblemáticas ya están marcando una tendencia : Adidas (con su programa de reuso “Pass it on»), H&M (compró la plataforma de ropa de segunda mano Illco), la multinacional Ikea (que permite revender sus muebles antiguos) o la promesa marketing de Coca Cola para “Un [supuesto] Mundo Sin Residuos”.
Desde el lado normativo, existen normas -por ejemplo el pago para plástico de solo uso o la obligatoriedad del reciclaje-con las cuales tenemos que alinearnos como empresa. El implementar un programa de reciclaje contribuye a la identificación de los colaboradores con su lugar de trabajo; me diferencia y posiciona como una empresa responsable con la comunidad e inclusive podría reducir costos en el servicio de recojo de residuos.
Una vez definida la motivación para implementar un sistema de reciclaje en mi organización, debo preguntarme, ¿Cómo lo podemos hacer?. El primer paso será responder a las siguientes preguntas: ¿Cómo se gestionan los residuos dentro de mi organización?, ¿Qué área o quién se encarga de ver este tema? ¿Lo realiza con el servicio municipal? ¿Nuestra empresa tiene un contrato con una Empresa Operadora de Residuos Sólidos (EORS)? ¿Estamos vendiendo algunos residuos? Es clave enmarcar dentro de la política de la empresa para tener el debido respaldo de la jefatura y en este caso, del área involucrada en RSE (Responsabilidad Social Empresarial). Esta información me ayudará a aclarar el panorama sobre la viabilidad de mi futuro Sistema de Reciclaje.
Luego, la empresa tiene que identificar a un aliado -una Asociación de Recicladores o una EORS- que satisface con la trazabilidad de mi reciclaje, la frecuencia y horarios de recojo, los requisitos como contar con un seguro (SCTR). El siguiente paso consiste en realizar un estudio para determinar la cantidad de material reciclable que genera mi organización, y así definir metas. Si mi empresa genera diariamente 100 kg, puedo definir una meta de 50% (es decir reciclar 50 kg) después de un plazo de 6 meses e ir incrementando esta meta progresivamente. Realizar un cronograma ayuda a determinar los tiempos, recursos y secuencia de labores.
Una parte vital en la implementación es la capacitación de todos los colaboradores: todos deben de estar enterados de los nuevos cambios para la gestión de nuestros residuos. En particular, explicar por qué la empresa ha decidido implementar el sistema de reciclaje y cómo podemos reciclar bien. Es importante hacer énfasis en capacitar al personal que se dedica al mantenimiento o limpieza dentro mi organización, ellos serán mis aliados internos que ayudarán a que el sistema de reciclaje tenga el éxito deseado.
¡Listo, empezamos a reciclar en mi organización! Ahora, ¿Cómo nos aseguramos que logremos las metas planteadas? El reciclaje es un cambio de hábito y será un proceso que requiere de tiempo y constancia.
No basta con una única capacitación para pretender lograr cambios reales en los colaboradores. Podemos lograr estos cambios con acciones como talleres, activaciones, intervenciones, difusión de material y otras estrategias creativas e innovadoras (el reciclaje no tiene que ser aburrido). Sean creativos y piensen en concursos, voluntariado, publicaciones, etc. Estas iniciativas sensibilizan o concientizan al colaborador sobre el impacto positivo que trae consigo el reciclaje, tanto ambientalmente como socialmente.
La efectividad de estas estrategias debe traducirse en mayores cantidades de residuos que mi empresa está reciclando, por lo cual necesito registros e indicadores que avalen esa información. La opinión de los colaboradores también me permite mejorar mi sistema y estrategias.
Un ejemplo práctico de aliado para un sistema de reciclaje es Mujeres Ecosolidarias en Arequipa. Esta organización de segundo nivel que articula a 4 asociaciones, brinda servicios -como el recojo de los residuos (empresariales y domiciliarios), la compra de material, la creación de valor agregado, la educación ambiental- y alianzas. Como Red de recicladoras, ha acopiado 546 Toneladas de residuos en 2019. Es un agente de cambio porque su labor económica permite la inserción social y conservación del ambiente. Ha trabajado con 8,000 familias, asesora el sistema de reciclaje de 1,000 colaboradores y sensibilizó a 5,000 niños en escuelas. El objetivo de Mujeres Ecosolidarias es ser un modelo rentable, sostenible y replicable.
Un Sistema de Reciclaje, va más allá de instalar contenedores diferenciados, es dar trazabilidad a nuestros residuos, es transversal y forma parte de mi cadena de valor porque involucra a varias personas o áreas dentro de mi organización. Es transformador, crea un compromiso de los colaboradores con la organización. Tiene un impacto ambiental y social, y es un elemento diferenciador que me permite comunicar mis buenas prácticas tanto hacia dentro como hacia afuera.
[1] Mujeres Ecosolidarias